Todo lo que sucede es una
bendición
Todo lo que sucede en tu vida
en este momento es lo que tenía que suceder de acuerdo a tu nivel de
consciencia.
Sin embargo, tienes la
posibilidad de moverte de allí, si así lo quieres.
En realidad, el universo está
esperando a que lo hagas, porque de esa manera serás más feliz.
“El Universo espera que seas
feliz
y que luego de ser feliz,
seas aun más feliz”
Neale Donald Walsch
Nada ni nadie tiene el poder
para impedir tu felicidad.
Si eso está ocurriendo en tu vida, es sólo porque has olvidado que
tienes el poder para avanzar, crecer y ser más sabio.
El primer paso a tu bienestar es aceptar con amor el lugar
donde te encuentras en este momento, honrarte y bendecirte por estar allí,
atravesando algún desafío en particular.
La aventura de crecer no
terminará nunca y más vale que te acostumbres a la idea de verte continuamente
retado por la vida para que cada día seas más grande, más consciente y más
feliz.
Bendecir el lugar donde te
encuentras hoy es un gran paso, porque
te da la paz, la confianza y la tranquilidad para ser más inteligente y
resolver rápidamente.
Cuando te culpas o te sientes
mal, retrasas tu proceso, demoras más en superar lo que ocurre y las cosas no
cambian.
Con el tiempo te sientes más
desgastado en vez de sentir que estás creciendo.
Cuando aceptas que estás en un
proceso, no te exiges más de la cuenta. Te haces más paciente contigo mismo y
te sigues amando de manera incondicional.
Al mismo tiempo comprendes que
los demás también están en su proceso y aunque puedas estar observando cosas
muy desagradables, una paz interior te hace sentir que todo va caminando hacia
su perfección.
Es muy fácil cuestionarnos o
cuestionar a los demás cuando las cosas no resultan como esperamos, pero ese
juicio solo hace que las cosas se compliquen más de la cuenta, porque en el
fondo todos vamos caminando a descubrir nuestra perfección.
Nuestro espíritu es perfecto
amor, pero nuestra personalidad condicionada no lo es y necesitamos tiempo y
espacio para recuperar esa memoria.
Nada ganamos con juzgarnos,
culparnos y cuestionarnos mutuamente.
Todo está bien así como está,
porque ese es el nivel de evolución que has alcanzado hasta este momento y eso
es magnífico.
Vienes de un olvido total y
hoy falta mucho menos.
Tu dicha se encuentra en la
certeza de que puedes avanzar. Si has advertido lo que se puede mejorar, ya
tienes gran parte del problema resuelto.
Ahora solo queda actuar, hacer
eso y ver cómo funciona. Puede que resulte muy bien o puede que no. Si no
funciona, tendrás que intentar con otra estrategia hasta que consigas alinearte
a tu guía interior. Cuando lo consigas sentirás una gran dicha.
Esa es la bendición escondida
detrás de tus desafíos, el hecho de que puedes hacer algo al respecto. Ese es
un gran privilegio. Ningún otro ser vivo en la tierra tiene esa gran
posibilidad de moverse, de modificar sus circunstancias, de crecer y
evolucionar para ser más feliz.
La dicha no está en el hecho
de que todo esté perfecto, sino en la posibilidad que tienes para hacer algo al
respecto, para recuperar la memoria perdida y volver a restablecer tu verdadero
origen.
Hay algunas cosas que no
podrás modificar y que solo tienes que aceptar y cuando lo hagas con todo tu
corazón, serás muy feliz. Esa será la ganancia.
Todo lo demás, te ofrece el
grandioso espacio para recordar más a cerca de quien eres.
Todo lo que te sucede en esta
vida es una bendición para poner a prueba tu capacidad de recordar de dónde
vienes y hacia dónde vas.
FUENTE:
evoluciónespiritual.com