Ponga un gato en su vida...o varios!
Once convincentes razones por las que su vida, amigo, y
su salud mejorarán si se decide a dar entrada en ellas al animal más perfecto
del mundo: el gato. O, mejor dicho, los gatos, porque estoy seguro de que,
después del primero, no resistirá la tentación de hacerse con otro, si no con
varios.
Aquí van esas razones:
1. Mantienen sano
el corazón.
2. Casi se
puede decir que inventaron la siesta.
3. No permiten
que el fracaso se cruce en su camino.
4. Sus
ronroneos calman de forma natural los nervios.
5. Viven el
instante.
6. Te hacen
reír como nunca pensaste que lo harías.
7. Nos enseñan
la importancia de tomar decisiones
estratégicas.
8. Pueden
ayudar a personas con autismo a comunicarse con el prójimo.
9. También
ayudan a luchar contra la depresión.
10. Saben que lo
de volverse loco de vez en cuando no está nada mal.
11. Suprimen la sensación de soledad con un amor
incondicional.
De todo ello, menos del punto octavo (que no pongo en
duda), puedo dar fe. Y aun me atrevería a añadir otras cien razones.
¿Cien? No. Mil
En el simpático artículo del Huffington, que está avalado
por la ciencia, se cita una frase de Eckhart Tolle que también hago mía: “He
vivido con varios maestros zen, y todos eran gatos”.
No es un koan. Es la pura realidad. ¡Feliz satori!